viernes, 5 de noviembre de 2010

Mejorando la autoimagen

Quizás alguna vez usted haya escuchado decir que Fulano tiene “un problema de autoestima”, “un pobre concepto de sí mismo”, “una autoimagen negativa” u otras frases por el estilo. A los practicantes de P.N.L. nos resulta útil interpretar literalmente tales dichos, pues dan cuenta de la forma como las personas vivencian y procesan la información que poseen respecto de sí mismas, del mundo que les rodea y de la manera como se relacionan con éste. Así, podemos ayudarnos y ayudar a otros a producir cambios significativos que permiten enriquecer nuestras vidas.

Como punto de partida, voy a aventurar una definición operacional del concepto de “identidad“. ¿Cómo podríamos definir adecuadamente la propia identidad en términos de P.N.L.? Propongo entender la identidad como “el mapa que tenemos de nosotros mismos”. Al igual que todos los mapas que poseemos sobre cómo es el mundo en el que vivimos, el mapa de uno mismo es una construcción basada fundamentalmente en nuestra experiencia de vida y el feedback que recibimos de los demás. Como todo mapa, éste es correcto sólo en parte; quizás en gran medida sea erróneo, pero es la única referencia de la cual disponemos para relacionarnos con el mundo.